El mejor juez de México está desconsolado. Y es que el gobierno de la cuarta transformación disminuirá “terriblemente” los sueldos de los servidores públicos. Ese es el argumento de El buen juez por su casa empieza, obra de cabaret político con dramaturgia de Ana Laura Ramírez Ramos.

“Estoy muy contenta y muy triste al mismo tiempo con lo que está sucediendo con la Ley de Remuneraciones con los jueces. Yo imaginaba que, pues les iba venir muy mal la noticia e iban encontrar nuevas maneras para no lograrlo y literal, está sucediendo”, compartió la dramaturga en entrevista, sobre cómo la ficción que escribió se trasladó a la realidad.

Presentada por Parafernalia Teatro y planteada desde inicios del 2018, esperó quién ganaba las elecciones presidenciales en julio para escribir la pieza teatral, para ver cómo sería la transición con un gobierno como el de Enrique Peña Nieto, “con todas las fallas y problemas que tuvo”.

“Yo pensaba en estas figuras políticas que no son presidentes y secretarios, pero que tienen mucha injerencia en la vida nacional, como son los jueces, y cómo sus decisiones afectan o no a unas personas que sí han hecho un daño, como a Javier Duarte que lo habían sentenciado sólo 9 años de prisión, en lugar de los muchos más que merece”.

Con el cuestionamiento siempre presente, consideró que la crítica aprendida son las formas antañas de gobierno dictatoriales, desde la década de los años 80, donde existía una exaltación de la política y de alabar a los presidentes.

“Ahora que por fin tenemos esa cosa que siempre deseamos, que fue un cambio que de verdad viera por la gente y no sólo por él, es cómo vas a hablar de eso, cómo vas a denunciarlo. No es una burla o risa simple, que Andrés Manuel habla lento, o cosas que todos vemos, es investigarle y ver dónde está el motivo de risa que se debe criticar”.

Para Ana Laura Ramírez Ramos, quien actúa junto a Amy Lira y Carlos Alexis en el espectáculo, el teatro era una línea de entretenimiento. Un vehículo para indagar en sus emociones, en su voz y su cuerpo, pero nunca para criticar. Hasta que hace 8 años tomó un taller con Cecilia Sotres, de Las Reinas Chulas, compañía de cabaret mexicano.

“Cuando tomé este taller, vi que la realidad era esa, que el teatro puede ser una excelente plataforma para hacer denuncias necesarias o visibilizar aquello que no está presente en las agendas. Ahí tomé el gusto por saber más, por ver quién decide qué y qué reacciones hay ante estas acciones”.

Al vislumbrar un 2019 con “bastantes” cambios, entre ellos el resurgimiento del cabaret político, detenido por la realidad “abrumadora” de violencia y corrupción durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, compartió que la pieza teatral invita a pasar un buen rato desde el humor, “vivimos periodos tensos entre la transición y el cambio de poder. No nos damos chance de respirar y reírnos de lo que está sucediendo, después de reírte, vas a poder reflexionar”.

Esta entrevista apareció originalmente en 24 HORAS